Diario de una mami primeriza que, con balbuceos y pequeños pasitos, se va adentrando en un mundo totalmente nuevo y maravilloso, ¡el mundo de la maternidad!



lunes, 24 de enero de 2011

La salud y mi embarazo

En primer lugar me avisaron de que me encontraría muy cansada, leí que probablemente tendría infección de orina en alguna de las etapas del embarazo, que me haría falta hierro y calcio, que engordaría las piernas y el culo (además de la tripa, claro), y un largo etc que, cómo no, estaba esperando a que sucediera.
Pues he de confesaros que estoy muy contenta con los síntomas que he tenido y que estoy teniendo (toco madera porque me quedan dos meses todavía!).
¿Cansancio? Los primeros meses no podía dormir casi nada. Me levantaba a mitad noche a hacer pipí, y luego ya no me podía volver a dormir. Durante el día no conseguía hacer la siesta, así que de dormir mucho nada, al contrario, apenas dormía 6 o 7 horas al día. Ahora, que estoy de 7 meses, es cuando más estoy notando que la tripa ya pesa y he tenido que acostumbrarme a no hacer mil cosas en un día sino a hacerlas poco a poco. Ir alternando las horas de movimiento con las de descanso en un mismo día, y no es por el cansancio en sí sino porque tengo molestias en la costilla derecha y sólo se me pasa cuando me tumbo en la cama.
Sobre los vómitos de los primeros meses, no he tenido más que uno, una mañana que tomé un zumo de manzana que no me gustó, ¡me fui directa al baño! Sí que he tenido náuseas con la comida durante el segundo mes, pero sólo náuseas si tenía que cocinar, si me hacían la comida entonces sí que la comía la mar de a gusto (menos mal que mi marido también es un cocinitas!)
La alimentación no la he variado casi nada. Intento controlar los dulces, pero no por el peso sino por los dientes, que quiero mantenerlos sanos. No como ningún embutido por la toxoplasmosis(ni jamón serrano, ni chorizo, ni sobrasada,...) a pesar de que hay gente muy "experta" por ahí que dice que no importa; yo prefiero estar tranquila. Lavo las verduras, especialmente las lechugas, con agua y unas gotitas de lejía alimenticia, y toda la carne y pescado que como la he congelado previamente. Como antes ya comía de todo, sigo con la misma dieta solo que he añadido almendras, pistachos y más verde cada día. Los análisis me han salido bien hasta ahora, no tengo ninguna carencia.
Así que, chicas, a veces nos mentalizamos de que nos van a pasar ciertas cosas porque son lo normal, y deberíamos confiar más en nuestros cuerpos, teniendo confianza en que vamos a estar bien y que no tenemos por qué estar "enfermas" cuando estamos embarazadas. Eso sí, una no está como una rosa, no es un estado ideal de plenitud porque cada día tienes alguna cosita, pero tampoco hay que pensar en cosas malas. Las matronas están ahí para ayudarnos en todo, nuestra pareja, las mamis, ¡que nos mimen todos en estos 9 meses! (que nos lo merecemos).

No hay comentarios:

Publicar un comentario